Hoy quiero comentarles un poco mi aventura con Don Quijote.
Desde que mi amo quiso que yo fuera su fiel caballo he visto mucho mundo.
Aunque sinceramente aún no comprendo cómo puede seguir vivo, con todas las golpizas que ha recibido debería estar ahora con Dios.
Realmente mi amo me parece un hombre admirable, y muy caballeroso. El intenta salvar a cualquier damisela que encuentra desprotegida. Empieza batallas contra gigantes y monstruos, y aunque no siempre termine victorioso, sigue defendiendo su honor de caballero.
Y para todos aquellos que dicen que Don Quijote está loco, el no está loco, simplemente el consigue ver una realidad que los que no son caballeros no consiguen ni apreciar.
Voy a dejarles aquí un retrato que nos hicieron a mi amo y a mi mientras estábamos por la mancha.
Esto ha sido todo por hoy.
Hasta el último relinchar,
Atte Rocinante.
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